De la Naturaleza del Amor (El amor es una bolsita de ketchup)

Recientemente una amiga me comentaba que tenía un amigo muy muy amigo suyo, el mejor; con el cual tenía un atracción física muy bestia y una relación sexual inmejorable, aparte de una gran amistad: que podía hablar de todo con él, que le conocía de hacía años, que se reía mucho, le ayudaba, al que llama cada vez que necesita de él y viceversa. Y esta situación, lleva un largo tiempo (meses y años), pero está abocada al fracaso en cuanto uno de ellos se eche novio, porque no son pareja, no son novios. Ella dice que "no se quieren".

Y creo que su relación es más "de pareja" que la de muchas parejas "establecidas" que conozco. Parejas que han perdido la confianza. Que la rutina les ha hecho odiarse. Parejas que sexualmente no conectan, que han perdido el "brillo", que ya no se besan en los cines, que no buscan los rincones para acurrucarse e intentar desaparecer para el mundo, mientras se descubren.

A veces pienso que quienes hemos estado alguna vez enamorados hemos magnificado la sensación de sabernos queridos. Tanto poema, tanta lírica...

Realmente uno no sabe explicar esa sensación de que ha encontrado, entre millones de seres humanos, y en el lugar más insospechado, aquél que va a ser su compañer@. Es su mejor amigo, es su complemento vital, su "yan" sexual, ... y como no sabemos explicar la sensación, la diferencia con la amistad, lo que lo hace exclusivo, entonces para explicarlo lo rodeamos de brillantina, nebulosa, palacios, príncipes y princesas. Pero creo que confundimos a quien no lo está.

Cuando estás enamorado y no tienes a alguien, entonces son las mariposas, los príncipes y los poemas.

Cuando amas y te aman, entonces la sensación de felicidad es diferente... es emocionante si lo haces emocionante, pero sólo es lo que, en el fondo, sabes que debía ser. Por eso la sensación de pérdida es tan profunda cuando llega el adiós, si llega.

El amor... para mí el amor es una bolsita de ketchup. Sí, no pongáis esa cara. Cada vez que como una hamburguesa en el BurguerKing, Él separa una bolsita de ketchup y me la lanza, porque sabe que me gusta echar ketchup entre la carne y el pan, y mientras lo hago él echa las demás sobre las patatas. Justo en el momento que me la da, nos miramos a los ojos, y yo sé que nos amamos. Ese pequeño y estúpido acto significa que piensa en lo que quiero, que recuerda mis gustos, que me tiene en cuenta,... y yo procuro no darlo por supuesto, y por eso, cada vez que lo re-descubro, le sonrío, él me guiña el ojo y yo le digo "tequiero", rápido y susurrando, proque no hay nada peor que un romance que huele a fritanga.

Yo no sé si mi amiga está equivocada y si enamorada o no, y no sé si ama a su amigo,... Pero creo que espera campanitas y confeti cuando le llegue, y en eso sí está equivocada. Es mejor, pero no es parafernalia romántica continua, el amor es una bolsita de ketchup.