Trastornada

Hay días en que me miro al espejo y no me gusto. Cuelgo el teléfono y me doy cuenta de lo borde que he sido. Mi chico se va y he conseguido que lo haga enfadado. Que asco... Pero es que es mi culpa por petarda. Y me temo que no va a cambiar. Mañana me despertaré temprano para ir a estudiar, me encontraré con una amiga a la que acabáré ladrando porque el tema 17 se me ha atascado esta noche y mañana tendré que volver a estudiarlo, y cuando llegue a casa tras 5 horas de coñazo (con perdón) y mi hermana me pregunte ¿qué tal? la mandaré a la mierda por algo, y si mi novio me propone hacer algo por la tarde, le odiaré por no tener la delicadeza de recordar que tengo que estudiar y que NO, NO PUEDO IR.

Conclusión: pido perdón al Mundo porque mañana me tendrá que soportar, y creedme, no hay nadie a quién le duela más que a mí, pero es que los exámenes me trastornan.